Carlos Silva acepta su culpa

El lanzador criollo protagonizó altercado con Aramis Ramírez

Carlos Silva es un tipo tranquilo, pero como a todo el mundo se le vuelan los tapones. Resulta que el miércoles pasado lanzaba el oriundo de Ciudad Bolívar ante los Cerveceros de Milwaukee y los Cachorros se parecieron más a los Osos Revoltosos o al equipo donde yo era pitcher estelar en las caimaneras de por la casa. En ese episodio cometieron 3 errores y de paso Silva permitió dos jonrones, por supuesto no siguió lanzando.

Al llegar a la cueva, Carlitos, quien está luchando por un puesto en la rotación de los oseznos, se sintió molesto e hizo un comentario que no le gustó al tercera base dominicano Aramis Ramírez.

"Fue un inning muy difícil, no sólo para mi equipo y para mis coaches, sino también para mí", dijo Silva. "Permití esos dos jonrones y vine a la cueva y traté de tomar las cosas suaves y relajarme y olvidarme y lo único que dije fue, 'Tenemos que empezar a hacer jugadas aquí', comentó el también ficha de los Caribes de Anzoátegui en una pequeña nota publicada en lasmayores.com. "Sé que fue un error. Fue mi culpa", dijo Silva. "No debo decir nada. Se ofendió y discutimos en el dugout. Ahí se quedó todo" añadió.

El lanzador derecho está buscando recuperarse y retomar la línea como abridor luego de quedar fuera de la temporada de 2010 por una lesión, para lograr eso primero debe controlar su temperamento.

"Conozco mi personalidad y sé como soy", dijo Silva en el clubhouse. "Le dije a (mi esposa) María que el único problema que tuve anteriormente fue discutir con los umpires. Sé que soy duro, sé que soy difícil y digo muchas cosas pero no soy un tipo que viene aquí a pelear o a tener ese tipo de relación con mis compañeros".

Su compañero, el también criollo Carlos Zambrano, ha protagonizado diversos altercados con sus compañeros. Es muy recordada la tanda de golpes que tuvo con su antiguo cátcher Michael Barrett y recientemente, el año pasado cuando se llevó a las manos con en estelar inicialista Dereck Lee. Esto obligó a que el equipo lo suspendiera y colocara en la lista de inhabilitados por algunos días. Tal vez su viaje al bullpen en plena campaña derivó en esa conducta.